Darle la oportunidad a un cachorro de formar parte de tu familia es una experiencia hermosa y gratificante; pero si tienes en casa a otro peludo, seguramente te preocupará que tu actual mascota no acepte al nuevo integrante. Tu temor es completamente razonable, sobre todo cuando tienes en tu hogar a un perro dominante. Si ya te decidiste y quieres integrar un nuevo compañero de cuatro patas a tu familia, entonces deberás seguir los consejos que te daremos en este artículo.
Instrucciones para presentar un cachorro a un perro dominante
La presentación es uno de los momentos más importantes en la vida de dos perros que empezarán a vivir en el mismo hogar. Este encuentro debe realizarse de la siguiente manera.
1. Escoge un lugar neutral fuera de casa:
Te recomendamos que le pidas ayuda a un amigo o familiar para que saque a pasear a tu nueva mascota, mientras tú haces lo mismo con tu antiguo perro. Después de que ambos hayan realizado una buena caminata para liberar energía, puedes realizar el encuentro entre los dos peludos en un lugar tranquilo y con pocos estímulos. Esto ayudará a que los dos perros estén relajados y no perciban que el otro animal está invadiendo su espacio. Deja que los perros se olfateen por algunos segundos y luego continúa el paseo junto a tu amigo. Tu lenguaje corporal debe ser muy calmado para que puedas transmitirlo a las mascotas.
2. Lleva el nuevo perro a la casa:
Espera a que los dos perros estén calmados. No debes dejar entrar a los perros de forma desordenada y desesperada. Primero debes entrar tú y jalar por la correa a tu antigua mascota. Enseguida debes dejar entrar al cachorro.
3. Separa a los perros:
Una vez que ambos perros están dentro de casa, debes entender que tu antigua mascota se sentirá extraña porque hay alguien nuevo en su hogar. Como sabes que tu perro es muy dominante debes evitar que haya mucho acercamiento en la primera semana, ya que podría reaccionar de forma violenta. Por eso debes encerrar al cachorro en una habitación con todas las comodidades que necesita y dejar a tu antiguo perro suelto. Con esto lograrás que las mascotas puedan olerse y sentir que están viviendo bajo el mismo techo para que puedan acostumbrarse a la presencia de la otra.
4. Deja que los perros se encuentren:
En varios momentos del día debes sacar al cachorro de la habitación y dejarlo andar por la casa, pero solo bajo tu supervisión para evitar cualquier accidente. Cuando veas que los perros se encuentran en una misma habitación, como por ejemplo en la sala, tienes que tratar de interactuar con los dos, para demostrarles el mismo cariño y atención a cada uno. Puedes acariciar a uno y enseguida pasas a acariciar al otro y también puedes darle juguetes al nuevo cachorro y usar esos mismos para jugar con el perro antiguo, esto los ayudará a entender que deben compartir sus pertenencias.
5. Dales de comer al mismo tiempo:
Cuando un perro es dominante quiere que todo sea para el primero. Por eso te recomendamos colocar los cuencos de comida de cada perro alejados el uno del otro, pero ubicados estratégicamente para que ambos puedan verse. Lo que debes hacer es enseñarles la orden sentado a cada perro y emitir el comando antes de colocar la comida en sus recipientes. Con esto los perros entenderán que deben estar calmados antes de comer porque eres tú quien manda y que la norma aplica para los dos. Si no sabes cómo enseñarle a tu perro a sentarse, puedes aprender ese y muchos otros trucos dentro de Educanino el mejor programa virtual de adiestramiento para perros.
6. Deja libre al cachorro cuando sea el momento:
Al finalizar la primera semana ya los perros deberán haberse aceptado y eso podrás notarlo cuando veas que el cachorro anda libre por la casa y tu perro antiguo no le hace nada. Este tiempo puede variar en cada mascota porque todos los peludos son diferentes, por lo que debes ser muy observador para poder dar este paso en el momento correcto.
7. Deja que los perros determinen su jerarquía:
Aunque tu perro antiguo es el dominante esto puede cambiar con el tiempo dependiendo de la relación que tengan tus mascotas. La jerarquía es algo que con los días ellos mismos establecerán y tú no debes forzar ninguna situación.
8. Debes trabajar en reducir el carácter dominante de tu antiguo perro:
Necesitas trabajar en este punto para que no ocurran problemas en el futuro con el nuevo integrante peludo. Además un perro posesivo no es algo que se deba ignorar pues puede generar consecuencias negativas en la convivencia en el hogar a largo plazo. Por eso te recomendamos leer las indicaciones que te damos en el siguiente artículo: Mi perro es posesivo conmigo.
¿Consejos para evitar los celos y peleas entre los dos perros?
- Tienes que darle a ambos el mismo nivel de atención para que no surjan celos ni rivalidades entre los nuevos hermanos. Puedes acariciar a uno de los perros con una mano y con la otra mano acariciar al otro perro
- Trata de establecer una rutina que respetes al pie de la letra. Para eso tienes que tratar de mantener tanto como puedas la rutina de tu antiguo perro para que él no note un cambio que lo haga sentir inestable. Trata en lo posible de hacer que el cachorro se adapte a la rutina del perro antiguo, para que este último no se sienta amenazado. Por supuesto sé consciente de que las necesidades de ambos son distintas debido a la diferencia de edad y por eso hay puntos en los que los perros no podrán coincidir en sus rutinas.
- Separa los recipientes de comida y nunca dejes que estén demasiado juntos porque la idea es evitar que un perro invada el espacio del otro.
- Cuando veas a los dos perros jugando o compartiendo saludablemente no intervengas, porque están creando su propio vínculo el cual es muy diferente al que tienen contigo.
- En los primeros días cuando los perros aún no se hayan adaptado el uno al otro, es mejor esconder los juguetes para que no haya peleas por esa razón. Cuando los perros se estén acostumbrando a la presencia del otro, allí si puedes sacarlos, pero como te dijimos anteriormente, tratando de que con el mismo juguete que juegue el nuevo perro, luego también juegue el antiguo, para que se acostumbren a compartir.
Ya no tienes por qué preocuparte, pues ahora sabes cómo presentar un cachorro a un perro dominante. Comienza a planificar el encuentro de tus dos peludos siguiendo todas estas pautas y confía en el instinto de manada que tiene cada uno, pues realizando las cosas de esta manera cuando menos te lo esperes tus dos perros serán como hermanos.
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