Mujer le da cariño a su labrador retriever

Labrador Retriever

El labrador retriever es un perro muy complaciente y un popular compañero de familia, con orígenes de perro de trabajo. Es una raza realmente hermosa por su pelaje abundante y brillante. Tiene muchas cualidades que seguramente querrás conocer y por eso te invitamos a leer hasta el final.

Características del labrador retriever

Este hermoso perro tiene una altura a la cruz qué se encuentra entre los 56 y 57 cm. Su peso es de 25 a 36 kg dependiendo del sexo de la mascota. Es un animal muy activo que le encanta estar en movimiento, por lo que requiere una buena dosis de actividad física diaria para mantener su complexión musculosa y fuerte. 

Está raza es compacta, tiene un cráneo amplio, un pecho de buena amplitud y una cola gruesa en la base, qué adelgaza gradualmente hacia la punta. Su pelaje es corto y denso con una capa de su pelo qué es resistente al agua. El manto se puede encontrar en tres variaciones de color, qué son negro, amarillo o marrón. 

Generalmente, el pelaje es de un solo tono, aunque en ocasiones es posible ver pequeñas manchas blancas en el pecho. El color amarillo puede variar en el tono, desde el crema claro, al rojo del zorro. Es un perro que madura rápidamente, porque alcanza su altura máxima entre los 6 y los 12 meses de vida, pero puede seguir ganando peso hasta los 2 años. 

Conoce la personalidad del labrador retriever

Es un perro conocido por tener una excelente relación con las personas y un alto nivel de obediencia. Tiene un deseo innato de complacer a sus dueños y eso hace que sea un compañero muy dócil. Suele ser bienvenido en cualquier lugar porque tiene un buen comportamiento. Siempre recibe a la gente moviendo la cola con emoción y disfruta mucho la compañía de personas.

Es una raza muy sociable, por lo que es muy difícil que sea agresiva o desconfiada. Ama a sus humanos y se lleva muy bien con los niños. No se lleva muy bien con la soledad, por eso se deben tomar las medidas necesarias para que el perro no sufra de ansiedad por separación. Sus orígenes como perro de caza hacen que en la actualidad sea muy activo y que tenga ganas de trabajar. 

Tiene un gran olfato y resistencia, por lo que le encantan las actividades como nadar, jugar a buscar y atrapar objetos como el frisbee. Este perro se sigue utilizando por organismos de seguridad para labores de rescate y detección de sustancias ilícitas, debido a su excelente olfato.

Requieren de un curso de adiestramiento canino para atenuar un poco la exuberancia natural de su conducta y evitar qué tengan comportamientos descontrolados, como arrastrar a sus dueños cuando vayan de paseo. Debido a su fuerte instinto de rescate, tiene un problema con el mordisqueo, por lo que es recomendable brindarles juguetes para morder.

labrador retriever sentado

Conoce el origen del labrador retriever

Tienen el mismo origen que la raza de perros Terranova y la raza Landseer, las cuales son de la costa este canadiense. Según los registros qué se tienen de esta raza, los labradores provienen de los perros de aguas de San Juan que eran de pelaje tupido y negros. Esos perros ayudaban en la cacería y a sacar las redes del agua.

El primer intento de cría se realizó durante la mitad del siglo XIX en Inglaterra y Escocia, después de que unos pescadores trajeran a estos perros a su casa. El nombre labrador retriever tiene que ver con la zona geográfica canadiense, qué se llama “El Labrador” y con el instinto cobrador de estas mascotas, pues “Retrieve” en inglés quiere decir recuperar. 

Esta raza fue reconocida el 7 de julio de 1903 por el English Kennel Club. El éxito que tuvo está raza en las exposiciones, hizo que este perro fuera conocido más allá de su nobleza y fuera apreciado por todas las naciones del mundo. En un incio los colores amarillo y marrón eran considerados como una falla en la cría, aunque con el tiempo se aceptaron y ahora tienen mayor demanda.

Labrador retriever difrutando del aire libre

La salud del labrador retriever

Es un perro muy activo, sano y robusto, por lo que no se debe tener miedo a enfermedades al momento de adoptar a un perro de esta raza. Pero existen ciertas enfermedades qué pueden ser hereditarias cuando no se realiza una cría prudente y controlada. Entre ellas podemos mencionar las enfermedades del aparato músculo esquelético, como la osteocondrosis, la displasia de cadera y de codos; también pueden ocurrir enfermedades oculares, como cataratas y daño progresivo de la retina. 

Por eso, al momento de comprar un labrador es importante asegurarse de que ningún perro con estas patologías esté involucrado en la crianza, y qué tanto los padres como las crías se encuentren genéticamente saludables. Es la única forma de evitar qué esas enfermedades se sigan propagando en los labradores retrievers.

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